Noticia

Actuar antes de un desastre: Principales hitos de la iniciativa Acción Anticipatoria en los Andes 

Después de 3 años trabajando junto a las comunidades y colaborando con actores clave de los sistemas nacionales de Gestión del Riesgo de Desastres en Perú, Bolivia y Ecuador, queremos compartir nuestra experiencia impulsando el proyecto Acción Anticipatoria en los Andes.  

La frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos, como sequías, inundaciones, incendios forestales y tormentas, están en aumento, impactando gravemente a la región andina. Perú, Bolivia y Ecuador figuran entre los países de mayor riesgo en América del Sur, enfrentando consecuencias como muertes, desplazamientos masivos, cortes de servicios, inseguridad alimentaria, brotes de enfermedades y pérdida de medios de vida. Este contexto exige medidas que vayan más allá de la respuesta a las crisis y logren tomar acción antes que sea demasiado tarde. 

Acción Anticipatoria en los Andes (AA-Andes), un proyecto ejecutado entre 2021 y 2024, estuvo orientado a fortalecer la resiliencia de las comunidades andinas frente a riesgos hidrometeorológicos en Perú, Bolivia y Ecuador. Esta iniciativa fue implementada por Practical Action, con la asistencia técnica del Centro del Clima de la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, el apoyo técnico y financiero de la Cooperación Internacional Suiza – COSUDE, desde el Hub Regional Lima y el co-financiamiento de la Z Zurich Foundation. 

¿Qué es acción anticipatoria?

La Acción Anticipatoria es el conjunto de medidas tomadas antes de que ocurra un evento pronosticado, con el objetivo de prevenir o disminuir sus impactos potenciales. 

Existe cada vez más evidencia que demuestra que al pronosticar con mayor precisión los eventos extremos y ejecutar acciones previamente planificadas y financiadas, no solo se reduce una crisis potencial, también se puede optimizar el uso de recursos para proteger a las personas más vulnerables. 

Componentes de la acción anticipatoria: 

  • Activadores: Responden a pronósticos robustos y dan paso al inicio de las acciones. 
  • Planes de acción anticipatoria: Medidas acordadas previamente por los actores clave del sistema. Pueden tomar la forma de protocolos y cartillas, e incluso incorporarse dentro de los planes de gestión del riesgo de desastres a nivel local. 
  • Mecanismos de financiamiento: Asignación de fondos para la implementación de planes de acción anticipatoria antes de producida la emergencia. 

Nuestras intervenciones

El proyecto promovió la integración de protocolos y acciones anticipatorias en los sistemas locales y nacionales de gestión del riesgo de desastres, colaborando con los sistemas de alerta temprana ya existentes para asegurar una preparación y anticipación eficaz ante posibles emergencias. AA-Andes intervino en las siguientes cuencas:  

Utilizando la metodología de Medición para la Resiliencia Comunitaria ante Inundaciones (FRMC), hemos analizado 21 comunidades en Perú y Bolivia para evaluar y mejorar su preparación comunitaria ante emergencias. Los resultados obtenidos han ayudado a orientar las intervenciones para que respondan a las necesidades específicas de las comunidades. 

El rol de las comunidades

La sociedad organizada juega un rol fundamental para las acciones anticipatorias. Por ello, hemos desarrollado un programa de capacitación de brigadas comunitarias que ha sido adaptado respondiendo a necesidades específicas de cada contexto.  

Por ejemplo, en Bolivia se formaron brigadas orientadas a comunidades indígenas. En Perú, en el contexto el impacto por el ciclón Yaku, el Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI) y la Mancomunidad de Lima Este promovieron una serie de jornadas de capacitación en Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades (EDAN) a las brigadas previamente conformadas por Practical Action. Esta información alimentó la toma de acciones de respuesta, así como la movilización y entrega de recursos de ayuda humanitaria. 

Estas brigadas juegan un rol fundamental para las acciones anticipatorias. Más de 117,800 personas han sido alcanzadas por brigadas formadas en colaboración con gobiernos locales de Perú y Bolivia. 

Asimismo, hemos promovido grupos comunitarios de monitoreo de lluvias para acercar a la población a su rol en las acciones anticipatorias y los sistemas de alerta temprana. Para ello, se ha colaborado con instituciones clave a nivel nacional, subnacional y comunitario.  

En Bolivia, junto a las fuerzas armadas y el Servicio Nacional de Hidrografía Naval se proyectan estrategias para involucrar las competencias y capacidades nacionales para implementar protocolos de medición con participación de los actores en terreno, con alcance nacional. 

Mejores pronósticos

Mejorar la manera en la que se comunican los pronósticos de eventos climáticos y el riesgo es clave para construir comunidades resilientes y más preparadas. Por ello, impulsamos los pronósticos basados en impacto para pasar de meras descripciones de «cómo será el tiempo» a evaluaciones sobre «qué va a hacer el tiempo». 

Colaboramos con actores clave en la región para elaborar y mejorar la comunicación de pronósticos que integren vulnerabilidad y exposición al riesgo de modo que permita tener información oportuna como insumo para activar los mecanismos de anticipación.  

El proyecto, con el apoyo del Centro del Clima de la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, ha organizado dos talleres con los servicios climáticos de Perú y Bolivia donde asistieron 46 profesionales del sector de Perú, Bolivia, Ecuador, Chile, Argentina, Paraguay y Colombia.  

Asimismo, en colaboración con estos servicios climáticos hemos implementado sistemas de monitoreo para cubrir brechas de información y aportar a mejores pronósticos. Instalamos 21 estaciones meteorológicas basadas en tecnología libre para monitorear la lluvia y el nivel del río en las cuatro cuencas del proyecto. 

Hemos implementado 10 estaciones hidrométricas con tecnología LiDAR que brindan información crucial sobre tiempos de anticipación frente a posibles crecidas de los ríos Beni, La Paz y Vilcanota.  

Colaboraciones clave 

Colaboramos con actores locales en comunidades seleccionadas de las cuatro cuencas hidrográficas para establecer protocolos de acción anticipatoria con medidas de anticipación específicas que se ajustan a las necesidades de cada comunidad. 

Los protocolos son documentos que orientan las acciones de los diversos actores del sistema de gestión de riesgo de desastres en distintos panoramas temporales a partir de la emisión de pronósticos.   

Comunidades, gobiernos municipales y las Plataformas de Gestión de Riesgos de Desastres de las municipales participaron en la validación de estos protocolos en simulaciones y simulacros. 

Asimismo, el 8 de julio realizamos el evento Caminos de resiliencia ante riesgos de desastres: Aprendizajes y pistas en el marco del proyecto Acción Anticipatoria, que contó con la participación de autoridades a nivel nacional, subnacional y local. Este espacio de reflexión marcó la culminación de esta experiencia y nos permitió compartir los principales avances, lecciones aprendidas y recomendaciones para los próximos pasos impulsando este enfoque.