Fortalecimiento de capacidades para la reducción de riesgos en la región de Cajamarca
Donante: USAID / Bureau for Humanitarian Assistance (BHA)
El proyecto buscó mejorar la operatividad de los sistemas locales de monitoreo y alerta hidrometeorológica, generando y proporcionando información adecuada para la toma de decisiones oportunas y eficientes; y, de este modo, mejorar las capacidades de preparación y respuesta a nivel subnacional, local y comunitario, movilizando y comprometiendo a la población y a los actores in situ en el diseño e implementación de estrategias sostenibles de gestión del riesgo, que puedan incluir proactivamente una perspectiva de género, personas con discapacidad y adultos mayores.
Objetivo
Reducir el impacto de los desastres en Cajamarca, mejorando la seguridad alimentaria y la protección de los medios de vida de las personas más vulnerables en las zonas urbanas marginales, centros poblados y comunidades rurales pobres.
Contexto
El proyecto se implementó en los distritos de San Bernardino (San Pablo), Chilete, Yonan y Contumazá (Contumazá), Baños del Inca, Magdalena (Cajamarca) y Celendín (Celendín) de la región Cajamarca, zonas con una alta probabilidad de ser afectados por lluvias según los escenarios de riesgo del Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres – CENEPRED, viéndose gravemente afectados por la ocurrencia de emergencias y contando con una atención y respuesta humanitarias ineficientes.
Estrategia
El proyecto introdujo estaciones de bajo coste para complementar la red nacional de sistemas de alerta y así garantizar la disponibilidad de datos meteorológicos locales y definir los parámetros adecuados, aumentó el conocimiento sobre los peligros y riesgos que afectan a la población mediante campañas y acciones de sensibilización. Además, trabajó en el fortalecimiento y capacitación de brigadas y plataformas de defensa civil para validar los planes y aumentar los niveles de participación de la comunidad en temas de estrategias y políticas de RRD. También fortaleció capacidades de las autoridades locales y regionales y de los funcionarios gubernamentales para implementar el Plan Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (PLANAGERD), brindó asistencia técnica y facilitó espacios para desarrollar herramientas y planes para implementar políticas correctas de reducción de riesgo de desastres.