Energía solar como una alternativa para la mitigación y la adaptación al cambio climático, que avanza desde contextos locales
En un escenario de crisis climática, la energía renovable se convierte en una alternativa global necesaria para reducir las emisiones de GEI en los siguientes años. Experiencias locales desde el Altiplano boliviano, están contribuyendo a generar evidencia sobre su impacto positivo.

Según el Acuerdo de París, la temperatura global debe mantenerse por debajo de los 2 grados °C; sin embargo informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) afirman que el planeta es más caliente de lo que ha sido en los últimos 125 mil años, y que esto tiene consecuencias cada vez más riesgosas para la vida, ya que existe una menor capacidad de adaptación, mayores amenazas climáticas, con eventos extremos cada vez más frecuentes, una menor disponibilidad de recursos, afectación y pérdidas en los ecosistemas y la biodiversidad, disminución de la seguridad alimentaria, etc.
Estamos hablando de una crisis climática causada por el acelerado calentamiento global en la última década, causado principalmente por actividades humanas como el uso de combustibles fósiles (petróleo, gas, carbón), la agricultura y la ganadería extensivas, la deforestación, entre otras.
Si bien la generación de energía convencional es una de las causas del problema, la energía solar representa una alternativa para mitigar la emisión de los gases de efecto invernadero (GEI), responsables en gran medida de este calentamiento global. s
La energía a partir de combustibles fósiles comprende más de un “80% de la demanda de energía primaria a nivel mundial” por su relación con las actividades humanas, y son responsables de más del 75% del total de emisiones de GEI (ONU).
La energía un sector priorizado en Bolivia

Mario en otra comunidad del Altiplano nos cuenta como este sistema fotovoltaico beneficia con acceso a agua a su comundiad.
“La Agencia Internacional de Energías Renovables (o IRENA, por sus siglas en inglés) calcula que el 90 % de la electricidad mundial puede, y debe, tener su origen en las energías renovables para el año 2050” (ONU)
Aunque para nuestro contexto puede parecer una meta casi utópica, Bolivia está trabajando para “fortalecer las acciones de mitigación a nivel sectorial y multisectorial, para el control y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero” y responder a los Compromisos Nacionalmente Determinados (NDC, por sus siglas en inglés) que en materia de energía incluyen el acceso total a la electricidad, el desarrollo de fuentes de energía renovables, la adopción de tecnologías limpias y eficientes en la producción industrial, la promoción del acceso a la energía, la diversificación de la matriz energética, entre otras.
“Al 2030, se ha logrado que el 79% de la energía consumida, provenga de centrales basadas en energías renovables (50% de la potencia instalada)” (Meta 3 del sector Energía, CDN).
El Estado Plurinacional de Bolivia, a través de la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, trabaja en un Plan de acción de mitigación que plantea ejes estratégicos con el fin de alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible y la mitigación del cambio climático en Bolivia frente a los desafíos climáticos existentes; este proceso es apoyado por el Programa Euroclima+ de la Unión Europea y la Agencia Francesa para el Desarrollo (AFD) con la asistencia técnica del Carbon Trust y Practical Action.
Pilotos locales impulsan evidencia para niveles nacionales y globales
En el marco de la elaboración del Plan Nacional de Mitigación, Practical Action ha implementado un proyecto piloto de riego tecnificado con energías renovables, promoviendo una agricultura resiliente y contribuyendo a la mitigación de emisiones de GEI en la comunidad de Icrana del municipio de Huarina situada en el Altiplano Boliviano.

Icrana fue seleccionada para este piloto, después de varios estudios realizados en diferentes comunidades de Bolivia, no sólo por sus óptimas características ambientales, sino también por su organización social.
Si bien la instalación del sistema fue posible gracias a este proyecto piloto, la misma contó con contrapartes municipal (2 tanques de almacenamiento 20 mil litros), el trabajo comunal (la instalación de los tanques, los canales de distribución y la construcción de la caseta de operación del sistema), contó además con una contraparte del proyecto Energía solar para promover la agricultura resiliente y mejorar la seguridad alimentaria en comunidades alrededor del lago Titicaca, ejecutado por Practical Action con apoyo de Ekoenergy ecolabel, Kilburn&Strode y la Fundación Eurofins, que además de aportar a la instalación del sistema fotovoltaico para riego, aporta con capacitaciones en agricultura resiliente y regenerativa para 10 comunidades en cinco municipios de la cuenca Katari, en el altiplano Boliviano.
Icrana celebra el acceso a agua


La comunidad de Icrana inauguró su sistema fotovoltaico con la participación de representantes de los gobiernos nacional y locales, autoridades comunales, representantes de la AFD y Practical Action el pasado 26 de marzo.
“Antiguamente, sólo usábamos el agua para consumo humano, ahora vamos a utilizar para la producción con riego tecnificado y eso es desarrollo y crecimiento para esta comunidad y para el municipio” señaló Wilson Mamani, Alcalde del GAM Huarina.
“Para nosotros como Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra es importante en el marco nacional de mitigación que las acciones no queden en planes sino lleguen a nivel comunitario” aportó Lizzeth Samo, directora del Mecanismo Conjunto de Mitigación y Adaptación de la APMT.
Por su parte, Mauricio Fernández, director del Mecanismo de Mitigación, expresó el trabajo que realiza la APMT para plantear alternativas ante el calentamiento global que deriva en desastres climáticos presentes en las comunidades con efectos que las personas sienten y afrontan diariamente. “Nuestro grano de arena es evitar la emisión de estos gases con esta tecnología limpia y buscar mejorar su vida.”
El diputado Hernán Durán participó también de la inauguración y señaló la importancia de mostrar los alcances de esta tecnología para escalar su implementación en diferentes niveles territoriales. “Este es un piloto y nosotros como legisladores, hemos apoyado a gestionar y conseguir estos pilotos para mostrar su impacto y que se repliquen”.
Shirley Pazos, directora de Practical Action en Bolivia, hizo énfasis en el trabajo colaborativo y la articulación de donantes, actores multinivel para proponer soluciones climáticas de adaptación y mitigación desde las comunidades. Señaló que es el primer sistema de riego 100% solar que Practical Action instala, después de haber trabajado mucho tiempo con sistemas híbridos. “Lo más interesante es que es un sistema independiente ya que no utiliza baterías, porque funciona aprovechando la energía potencial”.
Vincent Caupin, representante de la AFD en Bolivia insistió en la relevancia de un proyecto piloto para el cambio climático: “En el cambio climático no hay soluciones estandarizadas para todos los países. Hay soluciones que están adaptadas al país y al clima; para descubrir las soluciones adecuadas se necesitan investigaciones y compartir las lecciones aprendidas a partir de estos proyectos; por eso es importante analizar lo que funciona y lo que no funciona y compartirlo”.
“Estamos caminando juntos por un desarrollo del pueblo y sus necesidades y estamos articulando a actores de diferentes sectores para poder aportar a las comunidades en sus procesos de adaptación y mitigación frente a esta crisis climática”, concluyó Angelica Ponce, directora ejecutiva de la APMT.



Por: Mónica Cuba, Practical Action